Viajar en coche es una de las maneras más cómodas de traslado de una ciudad a otra, porque tiene la oportunidad de desplazarse a su propio ritmo, hacer las paradas que le apetezcan a toda la familia, disfrutar de un café o deliciosos dulces en algún local que le haya parecido muy pintoresco. Pero, si viaja con niños, es necesario recordar que ellos tienen un ritmo de vida muy diferente al de los adultos, por lo que se han dejado algunas recomendaciones para que su viaje sea agradable para todos, hasta para los más pequeños de la casa.

La seguridad es lo primero

Aparte de dejar su casa bien resguardada con la ayuda de su cerrajero de confianza, quien habrá realizado todos los ajustes necesarios. También debe verificar que su coche se encuentre en perfecto estado para emprender el viaje.

Los expertos sugieren que el vehículo sea sometido a una revisión minuciosa y así verificar que todo está marchando bien, esto incluye frenos, amortiguadores, batería, aceite del motor, hasta el aire en los neumáticos.

Por otra parte, recuerde que las leyes exigen que los niños con una estatura menor a 1,35 m, necesita una silla infantil. Las hay acorde al peso y estatura del niño. El no contar con este implemento de seguridad, podría ser la causa de una multa, sin mencionar que la seguridad de sus hijos estará en juego.

Planificación es la clave

A los adultos no les gusta un viaje durante horas, soportando calor o frío en exceso, a veces largas colas por algún accidente, o tener hambre por olvidar el bolso con la comida para el viaje, y además, atado a la silla del coche con un cinturón de seguridad. A los niños tampoco les agrada eso, La diferencia es que los consentidos de la casa no han desarrollado la capacidad de adaptación de los adultos a este tipo de situaciones.

Así que, planifique su viaje con antelación, con ayuda de un mapa, encuentre las mejores rutas para llegar a su destino, de una manera relajada y tranquila, con zonas de servicio en las cuales podrá parar, que todos estiren las piernas y disfruten del paisaje, antes de retomar la carretera.

Vestir ropa cómoda

Todos deberían vestir ropa cómoda, en especial los niños. Así que opte por prendas de algodón traspirable, que no sean ajustadas y que sus hijos puedan disfrutar de la libertad de movimiento.

También es ideal que controle el clima dentro del vehículo con ayuda de su aire acondicionado, que sea una temperatura agradable y que el aire acondicionado no llegue de manera directa al rostro de sus hijos. Nunca está de más que lleve consigo una chaqueta o toalla de mano en caso de que sea necesario tapar a su hijo para que descanse con mayor comodidad.

Comida ligera y mucha hidratación

Evite comidas pesadas o con mucha grasa, porque este tipo de alimentos suele provocar mareos una vez que inicia el desplazamiento sobre la carretera, y los niños no podrán soportar el malestar, probablemente llorarán y se quejarán, así que evite un mal rato para usted y todos en el coche.

Comidas ligeras, que sean fáciles de digerir y en pequeñas cantidades, evite las bebidas con gas y mantenga algunas botellas con agua, que le permitirá hidratar a toda la familia durante el viaje.

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